Un Super Bowl adelantado. Buffalo parece ser el mejor equipo de toda la NFL pues, no sólo derrotó a los Chiefs hace unas semanas, sino que ahora aplastó a los Detroit Lions en un duelo donde Josh Allen volvió a brillar.
Tras haber perdido la semana pasada, los Bills regresaron a la acción enfrentándose al equipo más enrachado de la NFL. Los Lions llegaban como el mejor equipo de la NFC con 11 triunfos consecutivos, sin embargo, a los Bills no les importó y anotaron 48 puntos.
Josh Allen tuvo otro día increíble al tener cuatro anotaciones totales, dos por aire y otras dos por tierra, terminando con más de 400 yardas totales. Además de la victoria, Josh Allen también impuso una nueva marca histórica pues, el mariscal de campo se convirtió en el primer jugador en la historia en anotar al menos 35 touchdowns combinados (aéreos y terrestres) por cuatro temporadas consecutivas.
Buffalo sacó la victoria gracias a un gran inicio con tres anotaciones en sus primeras tres series ofensivas. Con esto lograron sacar una ventaja de 21-14 al medio tiempo. Para el final del tercer cuarto, el equipo ya lo ganaba 35-14 y aunque Detroit se acercó, nunca lo suficiente para pensar en una remontada.
La diferencia del partido llegó en el cuarto cuarto, con el marcador 38-28. Dan Campbell, entrenador en jefe de los Lions, decidió lanzar una patada corta con más de 12 minutos por jugarse. Tras la patada los Bills tuvieron el balón en la yarda 5 de los Lions y una jugada más tarde extendieron su ventaja a 45-28.
Con el triunfo los Bills llegaron a un récord de 11-3 siendo el segundo mejor sólo por detrás de los Chiefs. Detroit por su parte cayeron a 12-2, empatados con los Eagles y con posibilidad de que Minnesota también los alcancen.
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