Gareth Barry, jugador del Everton, admitió que Diego Costa no lo mordió, tras encararse en el partido del sábado, que los de Liverpool terminaron ganando 2-0.
El árbitro mostró la tarjeta roja al español, después de que hubiera visto una supuesta mordida al cuello del mediocampista de los Toffees; Costa se acercó al futbolista inglés para encararlo, lo que ocasionó que fuera expulsado del encuentro.
Según el medio español, Mundo Deportivo, Barry publicó en una red social, llamada Fanzai, que el seleccionado con la Roja no le propinó ninguna mordida, por lo que no lo culpa de ninguna agresión.
“He visto muchos comentarios acerca del incidente entre Diego Costa y yo en el juego de anoche. Solamente para aclarar, Diego no me mordió”, declaró Gareth Barry.