Jesús Zarate
Comentarista, narrador e insider de los San Francisco 49ers en español, cuenta con información de primera mano de lo que sucede en la intimidad de los gambusinos y de la NFL
Juegos cruciales antes de llegar al descanso
Los San Francisco 49ers están con un récord de tres victorias y tres derrotas después de la Semana 6 de la NFL. En Atlanta no sólo se cortó una racha de dos victorias consecutivas, sino que también regresaron a la Bahía con más lesionados. No ha sido nada sencillo perder jugadores por lesión en cada partido. Sin embargo, el equipo está de líder de su división debido a que venció a los Rams y a los Seahawks, y aunque los tres equipos están con la misma marca, eso le da la ventaja a los gambusinos en la División Oeste de la Conferencia Nacional.
Este domingo, los Niners recibirán en Levi's Stadium la visita de los Kansas City Chiefs y en la Semana 8 viajarán al SoFi Stadium, en Los Angeles, para enfrentarse por segunda vez a los Rams, su rival divisional. Son dos juegos muy importantes en el calendario de los 49ers antes de llegar a la semana de descanso que les ayude a recargar baterías y recuperar algunos jugadores.
Desde principios de esta semana, el entrenador en jefe Kyle Shanahan mencionó que quizás Nick Bosa y Trent Williams podrían estar de regreso. Mike McGlinchey también podría tener oportunidad. Habrá que esperar qué sucede poco antes de arrancar el juego contra los Chiefs, pero definitivamente son noticias alentadoras.
Mientras más piezas clave recupere el equipo, las posibilidades de triunfar aumentarán en los próximos dos duelos. Pero incluso sin los jugadores ya mencionados, los Niners deben encontrar la forma de ganar al menos uno de estos dos juegos para llegar a la semana de descanso un poco más tranquilos y quizás todavía instalados en el primer lugar de su división.
Es un momento muy inoportuno para llegar con una lista larga de lesionados a enfrentar a un equipo del calibre de los Chiefs y después a unos Rams, que aunque San Francisco ya los venció 24-9 en la Semana 4, no dejan de ser peligrosos; cuando los derrotaron, los gambusinos estaban un poco más sanos.
A pesar de que tienen bajas importantes en prácticamente todas las posiciones, San Francisco puede ganar estos próximos partidos si evita errores y corrige detalles como eliminar penalidades y, claro, siendo más efectivos en tercera oportunidad cuando se tiene el balón. Con su situación actual hay menos margen de error y el equipo debe buscar ser lo más perfecto posible en ambos lados del balón, incluso en equipos especiales.
Al enfrentar a los Chiefs, la defensiva de los 49ers deberá estar muy alerta cada que Patrick Mahomes se salga del bolsillo de protección y comience a improvisar, porque muchas veces hemos visto que, en tercero y largo, logra mover las cadenas. La defensiva de San Francisco debe salirse del campo y obligar a Kansas a despejar, la mayoría de las veces que esté en tercera oportunidad, para cortar ese buen ritmo ofensivo que Mahomes y compañía suelen tener. Sobre todo, tendrán que buscar la manera de controlar la conexión entre Travis Kelce y Mahomes.
Ofensivamente, sería ideal que los 49ers controlen el tiempo de posesión y tengan series largas que terminen en puntos. Eso mantendría a la ofensiva de los Chiefs fuera del campo y le daría oportunidad a los 49ers de jugar el tipo de partido que más les convenga.
Frente a los Rams, todo comienza controlando a Aaron Donald. Normalmente, la línea ofensiva de San Francisco ha hecho un buen trabajo contra Donald. Además, ayudará lanzar pases rápidos para evitar la presión que puedan llegar a ejercer. Cooper Kupp también siempre es un arma que se debe tener bajo control.
Ofensivamente, será importante que San Francisco establezca su juego terrestre temprano, ya que, si lo logra, tendrán la oportunidad de frustrar a los Rams y dominar en las trincheras.
Esperemos que los 49ers pronto puedan ir recuperando jugadores clave para hacer más fácil el panorama, pero si no, hay maneras de ganar los partidos siempre y cuando sean muy efectivos en cada jugada y no le regalen absolutamente nada al rival.