Tras el análisis de la trifulca que se dio en el Estadio Alfonso Lastras, la Comisión Disciplinaria tiene listo el castigo. Este miéroles se hizo oficial la sanción correspondiente: dos partidos sin público para el inmueble potosino, veto para las porras de San Luis y Querétaro y una múlta de 6 mil UMAS, poco más de medio millón de pesos, para ambos clubes.
Además, ambos equipos recibieron la prohibición de "permitir, ayudar o facilitar" el acceso de los grupos de animación para sus juegos tanto de locales como de visitantes durante lo que resta del Apertura 2019 incluyendo Liguilla; así lo confirmó la Disciplinaria en un comunicado.
Todas las partes involucradas, el equipo de Atlético San Luis, los líderes de las porras, la Policía Estatal, así como a la directiva y porra de Gallos Blancos, también fueron entrevistadas y ya se reunieron las pruebas necesarias que llevaron a la Comisión a determinar las sanciones para ambas porras.
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En caso de jugar a puerta cerrada el siguiente encuentro y no cambiarlo de sede, la taquilla de los potosinos se verá seriamente afectada, ya que su próximo partido como local es contra el América y se esperaba que la entrada fuera espectacular; sin embargo, no es la primera vez que algo así ocurre.
En el Clausura 2016, cuando en la Jornada 7 las aficiones de Veracruz y Tigres tuvieron un enfrentamiento en las gradas, que culminó en una pelea campal similar a la del pasado domingo en San Luis Potosí, por lo que el siguiente encuentro en el puerto jarocho que se dio ante Cruz Azul tuvo que realizarse a puerta cerrada.
