Sin importar el resultado, la afición celeste se dio cita por última ocasión el Estadio Azul, para darle último adiós al recinto que durante dos décadas fungió como hogar de La Máquina celeste.
El partido contra Monarcas Morelia, se convirtió en el marco para una última comunión entre el conjunto cementero y la afición, que nunca dejó de apoyarlos.
Desde muy temprano, la tienda oficial del club lució abarrotada por la afición celeste, pues todos y cada uno esperaban poder adquirir el parche conmemorativo del último encuentro de La Máquina en la colonia Noche Buena.
Tal es el caso de Isaác, quien soportó una fila interminable para conseguir llevarse un último recuerdo del Azul. “Es un gran recuerdo (el parche) , aquí se fue gran parte de la historia del equipo y del Estadio, por eso es importante tenerlo”, explicó.
Asimismo, el joven aficionado se dijo contento por la mudanza del equipo al Estadio Azul, sin embargo, reveló que la Ciudad de los Deportes siempre será celeste.
“Yo me identifico más con el Azul, me tocó verlos en el Azteca, sin embargo acá crecí y obvio hay sentimiento”, sentenció.