Mónaco sumó este miércoles sus tres primeros puntos en la Champions League gracias a los errores defensivos de un Tottenham que mereció más, pero al que se le hizo excesivamente largo el encuentro.
El club inglés dominaba en el arranque del partido, pero fueron los visitantes los que abrieron el marcador justo antes de cumplirse el primer cuarto de hora de partido. Tras una pérdida de Lamela en la zona de creación, Bernardo Silva no desaprovechó la ocasión, haciendo el primer tanto para el Mónaco en una gran jugada personal.
Cuando más cerca estaba el primer gol de los 'Spurs', llegó el 0-2 para los del Principado, obra de Lemar, tras un mal rechace de Vertonghen al centro lateral de Sidibé.
Este segundo gol sí afecto al Tottenham, y tras unos minutos en los que el Mónaco se hizo con el control del balón llegó un tiro de esquina ejecutado por Lamela y cabeceado de manera impecable por Alderweireld en el primer palo, acortando distancias en el marcador.
Aunque todo apuntaba a que los de Jardim tenían el partido controlado con un 0-2 en el marcador, el tanto justo antes del final de la primera parte dio alas a los de Pochettino para afrontar la segunda parte.
A medida que avanzaban los minutos del complemento, el Tottenham se fue haciendo con el control del partido, obligando al rival a retrasar sus líneas y concentrar a sus 11 jugadores en defensa. La ocasión más clara para igualar el partido la tuvo Kane en el minuto 78, con un lanzamiento desde el punto de penalti que no aprovechó.
Los esfuerzos del conjunto londinense no fueron suficientes para conseguir el empate, dando la victoria a un Mónaco que sacó gran provecho de los errores de su adversario.