Sergio Ramos, capitán merengue, sufrió una dura patada en el rostro en el partido del Real Madrid contra el Atlético de Madrid en el Wanda Metropolitano, acción que le causó una fractura del tabique nasal.
Al minuto 36, Lucas Hernández lanzó una patada disputando el esférico dentro del area, pero no logró conectar con el balón y acabó por impactar la cara del defensor, por lo que fue atendido por el cuerpo médico, tras esto tuvo que ser sustituido acabando la primera mitad por Nacho.
La jugada causó polémica para los aficionados que pedían penalti a favor del equipo visitante, pero el juez central no marcó nada.
