José Mourinho y su Manchester United le ganaron la partida en Old Trafford a Rafa Benítez y al Newcastle (4-1) en un partido marcado por los esperados regresos de Zlatan Ibrahimovic y Paul Pogba.
El United, que tuvo que remontar el tanto inicial de Dwight Gayle, goleó sin miramientos a las 'Urracas' por un contundente 4-1, recuperó la segunda plaza de la Premier League y redujo a ocho puntos la desventaja con el líder de la tabla, el Manchester City.
El conjunto de Benítez, recién ascendido a la Premier, silenció Old Trafford y dio la sorpresa a los 14 minutos, cuando Gayle aprovechó una gran jugada por la derecha de Yadlin y un impreciso resbalón del defensa Lindelöf para empujar el esférico y superar a DeGea.
Se rehicieron los locales en la recta final del primer tiempo y le dieron la vuelta al electrónico en ocho minutos, primero con un tanto de Martial (37') -su séptimo gol de la campaña- a pase de Pogba y después merced a un testarazo de Smalling en el segundo palo en el tiempo añadido.
Ahí se derrumbaron los visitantes, que apenas presentaron oposición a la vuelta de vestuarios. A los nueve minutos de arrancar la segunda parte, Pogba volvió a demostrar lo mucho que lo echó de menos su equipo en los últimos 12 partidos con el tercero del United a pase de Rashford.
No marcó el Newcastle pero sí el United, que completó la goleada en el minuto 71 gracias a Lukaku, quien, tras un gran uno-dos con Mata en la frontal y un fallo clamoroso de Lejeune en el despeje, se plantó solo ante Elliot. El belga, con todo el tiempo del mundo, fusiló sin miramientos al guardameta y subió al luminoso del 'Teatro de los sueños' el definitivo 4-1.
Todavía hubo tiempo para ver el regreso del veterano Zlatan Ibrahimovic siete meses después de haberse roto el ligamento cruzado anterior de una rodilla. El sueco, que recortó en un mes los plazos de recuperación, volvió a sentirse futbolista en el minuto 76, cuando ingresó por Martial entre los aplausos de una grada entregada.
Zlatan estuvo a punto de regresar con un gol, pero su gran remate de tijera poco después de su ingreso lo mandó a saque de esquina Elliot con una gran mano.