Faltan exactamente 100 días para el arranque de los Juegos Olímpicos de Río 2016, y la organización de ellos va conforme a lo esperado, aseguró el embajador de Brasil en México, Enio Cordeiro.
El diplomático enfatizó que tanto el virus del Zika como la contaminación del agua de la Bahía Guanabara, que preocupan rumbo a la justa, están totalmente controlados.
"La bahía es algo tremendo en término de dimensiones, tiene 380 kilómetros cuadrados y hubo una recuperación de la calidad de las aguas bastante importante en los últimos años, desde 2007.
"El tratamiento del desagüe pasó de 21 por ciento a más del 50 por ciento. El único problema que hay es que, como hay un tráfico importante de buques comerciales, siempre hay una basura flotante y esto se tiene que controlar a través de más eco barcas que ahí están instaladas pero es algo que se está controlando", explicó el embajador.
En el caso del Zika, Cordeiro informó que Brasil detectó prontamente la existencia del virus, por lo que no hay de qué alarmarse.
"Es algo en lo que nosotros hemos actuado y seguimos actuando con las autoridades del sistema de salud y, seguramente, esperamos que eso no venga a ser un problema por las medidas sanitarias tomadas. El momento también es favorable por la menor incidencia en el periodo de la realización de los Juegos", expuso.
Con el encendido del pebetero en el Comité Olímpico Mexicano (COM) y el izamiento de las banderas de Brasil y México, se inició la cuenta regresiva para los primeros Juegos de la historia en Sudamérica.
Carmelita Correa, quien busca la marca olímpica en salto con garrocha, fue la encargada de iniciar la flama del pebetero mexicano.
