El bolsillo de los fanáticos de los Patriots sufrió el pasado domingo, al pagar cinco dólares por agua de la llave, durante el duelo contra los Texans en Gillette Stadium.
Todo el conflicto comenzó por el intenso calor de 30 grados centígrados en Foxboro. El clima provocó que los seguidores agotaran el agua embotellada en el recinto, a pesar de que el club había solicitado el doble a su proveedor.
Ante la ausencia del vital líquido, los aficionados solicitaron agua del grifo, pero ante la sorpresa de todos ésta fue vendida en alrededor de 90 pesos mexicanos.
La sitaución provocó un gran malestar de los fans, que se quejaron con publicaciones en redes sociales.
Stacey James, portavoz de la franquicia, reconoció lo sucedido y pidió disculpas en nombre de los Pats.