Si eres de esos corredores que no se pueden resistir al Maratón Guadalupe-Reyes, toma tus precauciones, pues los excesos podrían traer repercusiones no sólo en el entrenamiento sino también en tu salud.
El periodo que comprende del 12 de diciembre al 6 de enero se caracteriza por las fiestas, posadas y celebraciones de Navidad y Año Nuevo, en el que se debe tener un equilibrio sobre todo en la ingesta de alimentos y alcohol.
Es importante que sepas que la cruda y el ejercicio no son compatibles, así que después de una noche de descontrol lo mejor es que te quedes en casa, duermas al menos ocho horas continuas, te hidrates y comas adecuadamente antes de querer salir a correr.
Al hacer ejercicio, el organismo requiere un buen metabolismo que procese los alimentos que generan la energía, una buena circulación para mantener el flujo de sangre y la frecuencia cardiaca, así como una respiración óptima para poder oxigenar los músculos que se están utilizando.
Especialistas aseguran que la fatiga por la fiesta se duplica en el momento en el que el organismo se somete al trabajo físico, por lo que puede aumentar el dolor de cabeza y el mareo, presentarse desde un vómito hasta pérdida momentánea de la conciencia.
Una vez que te hayas recuperado estarás listo para continuar. Planea bien tus objetivos de entrenamiento y tu agenda social. Eso sí, no olvides que todo en exceso es malo.