San Francisco se quedó a la orilla de la gloria en el Super Bowl LVIII, pero comenzaron con el pie derecho esta temporada aplastando a los Jets en casa, por lo que los 49ers demuestran que de nueva cuenta son un equipo contendiente a levantar el Vince Lombardi al vencer con jerarquía a los Jets.
La defensiva de San Francisco comenzó a hacer su trabajo desde la segunda serie ofensiva donde recuperaron un balón suelto para marcar los primeros tres puntos del juego y a pesar de que los Jets de Aaron Rodgers respondieron con un Touchdown, 49ers nunca perdió el control del partido.
A pesar de la sensible baja de Christian McCaffrey, el sistema ofensivo orquestado por Kyle Shanahan fue clave y utilizó a todas las grandes armas que tiene a la ofensiva para hacer daño y Jordan Manson corrió para más de 100 yardas.
San Francisco tuvo una racha de cinco series ofensivas consecutivas sumando puntos, lo que puso el juego cuesta arriba para los Jets de Rodgers, quien lanzó una intercepción al final de la primera mitad.
El ataque tórrese de Jets fue nulo, sumaron menos de 40 yardas totales por lo que Aaron Rodgers tuvo que cargar con toda la ofensiva, lo que ocasionó que este se volviera predecible y que la defensiva de San Francisco.
Finalmente los 49ers se quedarían con la victoria 32-19, Allen Lazard puso el Touchdown con 25 segundos del final.
