Texano Jr. es la tercera generación de una dinastía que ha sido fundamental en el arte de los costalazos y que ha aportado grandes figuras. Actualmente junto a su hermano Súper Nova, representan a la ‘Sangre Texana’, dúo que pone a temblar a otras familias luchísticas como la Familia Real, Los Golpeadores y la Familia Wagner, sólo por mencionar algunas.
Previo al Día del Padre, la “Pura Reata” recordó a su progenitor, también llamado Texano, quien fue el responsable de inculcarle la pasión por la lucha libre, puesto que la mayor parte de su infancia la vivió en las arenas.
“Crecí en un entorno meramente luchístico, donde los domingos en lugar de ir al parque, era ir al Toreo de Cuatro Caminos, convivía con los luchadores de moda y con sus hijos en las fiestas. Como niño me gustaba mucho ese ambiente y esa algarabía que se vive en la lucha libre”, detalló Texano Jr. para RÉCORD.
Juan el Texano siempre se entregó arriba del ring con grandes combates, pero hay uno que su hijo lo recuerda con mucho cariño por las emociones que sintió en ese instante.
“Fue un pique que mi padre tenía con Scorpio papá, en esa ocasión, llovía en el Toreo porque no estaba completamente techado y la gente compraba impermeables de plástico para estar dentro del recinto. En la lucha le quitaron un impermeable a alguien del público y con ese mismo se estaban ahorcando, recuerdo como muy traumática esa lucha para mí, porque yo pensé que alguien iba a caer desfallecido”, contó entre risas el luchador.
Texano Jr. no sólo lleva el nombre del personaje de su papá sino también el recuerdo grabado en el corazón del ser humano que fue, ya que a pesar de ser de mano dura con sus hijos, siempre se portó a un gran nivel como papá.
“Fue mi amigo, confidente, maestro, un padre muy enérgico, muy duro. Como compañero de trabajo era una chulada, siempre tenía una palabra de aliento o un consejo. Ir con él a una gira de lucha era una locura, te traía siempre muerto de la risa”, concluyó.