Cruz Azul estuvo cerca de realizar una hazaña que para muchos era impensable: sacar tres puntos del Estadio BBVA y terminar con la sequía de victorias en este campeonato; sin embargo, tuvieron que conformarse con el empate frente a unos Rayados que no supieron finiquitar al rival.
En el pecado llevaron la penitencia. La Máquina se dedicó a aguantar la mayor parte del partido, renunciaron a la tenencia del balón y buscaron contragolpear al rival que fue dominador del partido.
Matías Vuoso demostró que atraviesa por un buen momento en su carrera. Le bastó un centro al área por parte de Fernando Belluschi al minuto 5 para rematar de cabeza y mandar el balón al fondo de las redes, lo que representó la ventaja para la visita.
Al minuto 72 Pabón encontró una pelota afuera del área y disparó sin piedad contra la cabaña de Corona, quien se estiró pero no logró evitar la caída de su marco y con ello la pérdida de dos puntos que hubieran sido un tanque de oxígeno para su equipo.
El lado positivo para Sergio Bueno es que al final se logró el cometido de frenar la seguidilla de derrotas y lograr un punto que le permitirá trabajar con un poco de tranquilidad de cara al Clásico Capitalino contra los Pumas de la UNAM.