El club de la MLS que quiere al aún futbolista de Tigres, cuyo nombre se reservará RÉCORD hasta que se cierre el traspaso, tiene ya un precontrato con Jürgen Damm en el que existe una cláusula de penalización para quien rompa la negociación, es decir, si el equipo decide no contratar al extremo deberá pagarle 1.5 millones de dólares y aplica igual del otro lado, si Jürgen decide no ir, tendrá que solventar la misma multa al equipo estadounidense.
El contrato actual de Damm expira en julio de este año, por lo que desde enero es libre para negociar con cualquier equipo, y como los felinos mostraron poco interés en renovarlo, hoy el futbolista ha encontrado una sensacional opción para mostrarse en la liga vecina.
Y se va gratis. El club estadounidense no pagará un peso a los felinos del norte. En el contrato del extremo con el equipo de la UANL no existe cláusula de renovación automática, como se especuló en la prensa.
El sueldo de Damm apenas subirá: 10 por ciento más de lo que hoy percibe con el equipo de CEMEX. El gran motivo del jugador para emigrar es tener minutos de juego, esos que le han faltado bajo el mando del Tuca Ferretti, especialmente en meses recientes, conforme se ha acercado el fin de su contrato.
La directiva encabezada por Miguel Ángel Garza tendrá una última reunión mañana con el felino y su representante. Pero se presume que será meramente de protocolo, pues la decisión del jugador y sus cercanos sobre su futuro está en el futbol de Estados Unidos, convirtiéndose así en un mexicano más que emigra al país del norte.
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