Cuando parecía que Maximiliano Meza se quedaría otra temporada con los Rayados para finalizar su contrato y marcharse libre en unos cuantos meses, sorpresivamente llegó el River Plate para regresarlo a Argentina, pedido por Marcelo Gallardo. Su salida marca el fin de una etapa en Monterrey que comenzó en 2019.
Cuando llegó a la Sultana del Norte, procedente del Independiente por una cifra cercana a los 15 millones de dólares, se convirtió en el segundo traspaso más costoso en la historia del club, solo por debajo de Rodolfo Pizarro. Sin embargo, tras cinco años en el equipo, su regreso a Sudamérica se concretó por una cantidad mucho menor, únicamente 2MDD, lo que refleja un declive en su valor de mercado.
Durante su estancia en Monterrey, Maxi, quien venía de jugar la Copa del Mundo 2018 con Argentina, siendo además considerado una “joya” en su país, tuvo muchos altibajos, en ciertos momentos ganándose el cariño de la afición, incluso llegando a ser capitán, y en otros, sobre todo recientemente, recibiendo las críticas de los seguidores albiazules. En total, el atacante disputó 238 partidos con La Pandilla, donde anotó en 39 ocasiones, además de brindar 32 asistencias.
A pesar de su dificultad para mantener una regularidad en su nivel, Meza fue titular prácticamente con todos los entrenadores que pasaron durante su tiempo con el equipo, siendo pieza importante para levantar títulos con Rayados, incluyendo una Copa MX (2019-2020), una Liga MX (Apertura 2019) y dos títulos de la Concacaf Liga de Campeones (2019 y 2021).
