"Mi sueño de vida siempre fue ser jugador de Pumas y no me podía ir de ahí sin ser campeón”, contó, con la voz entrecortada, Joaquín Beltrán, luego de ser cuestionado sobre qué se siente ser un capitán histórico al haber levantado cuatro trofeos con los felinos.
Beltrán, con el '3' en la espalda, fue el capitán de aquellos Pumas que en 2004 ganaron todo y por ello él se siente afortunado, pues sabe que no cualquiera puede levantar dos títulos de Liga, el Trofeo Santiago Bernabéu y un Campeón de Campeones.
"Fueron momentos increíbles. En 2004 me tocó levantar los cuatro, pero levantar el trofeo es ser simplemente el representante de todos.
"Es darle valor a cada trofeo porque cada uno tiene un valor muy especial: el de Chivas fue mi primer campeonato con Pumas; luego el Campeón de Campeones, el hecho de vencer a un Pachuca que era un buen equipo; levantar un trofeo en el Santiago Bernabéu; luego el segundo ganarle al Monterrey y ser el primer equipo bicampeón en torneos cortos fue muy especial. Me siento muy afortunado de haberlos podido levantar", afirmó a RÉCORD.
Beltrán compartió lo que sintió al haber ganado su primer trofeo (ante el Rebaño). "Ver pasar a mis compañeros, recibir su medalla, ser el último en la fila para recoger el trofeo de manos de Decio de María, fue muy especial. Levantarlo y, además, en casa, no hay nada como ser campeón, pero en tu casa y con tu gente tiene un plus.
"Un capitán tiene que ser una persona que al final busque que el equipo esté unido y convencido de su objetivo, y siempre me sentí agradecido con esa postura”, finalizó.