Esta noche contra Atlas, Rodolfo Pizarro podría volver a tener minutos con el Pachuca y sellar con un triunfo su pasaporte a la Liguilla.
Atrás quedó la lesión que sufrió en los pasados Juegos Olímpicos de Río con la Selección Mexicana, cuando una desafortunada jugada le rompió el peroné y lo dejó fuera casi tres meses.
“La lesión quedó atrás, estaba un poco cargado, un poco fatigado del partido, de no tener ritmo de juego, me sentí muy bien”, contó el mediocampista a RÉCORD.
Después de su recuperación, Pizarro participó con la Sub 20 de los Tuzos, contra Santos y Chivas. “Ha sido muy difícil, el partido contra Santos me sentía muy mal, con mucha molestia; me sentí mucho mejor, partido con partido voy a ir mejorando”.
En un principio la recuperación del tamaulipeco sería de casi cuatro meses, pero al final evolucionó más rápido de lo esperado. “Que no me hayan operado fue una gran ventaja y ahora quiero pensar en ayudar a mi equipo y estar al 100 por ciento en Liguilla”.
Pizarro confesó lo que pasó por su mente después de que el doctor de la Selección le dijo que no podía continuar en los Olímpicos.
“Lo más difícil fue asimilar la lesión y que quedaba fuera de los Olímpicos, pero ya después por algo pasan las cosas y hay que ver sólo lo que viene”, aseveró.
El ofensivo aseguró que será una labor complicada recuperar la titularidad en el esquema de Diego Alonso, ya que el equipo se encuentra en buena forma y será difícil que cambie su alineación.
“Hay mucha competencia sana, mucha competencia interna muy buena, esta Víctor Guzmán, quien lo ha hecho muy bien, está Érick Aguirre, así que cualquiera puede suplir a cualquiera. Al final todos han respondido”, expuso.