El portero Sergio Rico, con sus puntuales intervenciones en la primera y segunda parte, incluido la parada de un penalti, le dio la victoria 1-0 al Sevilla ante el Girona, un rival que ratificó en el Sánchez Pizjuán que es una de las revelaciones en este su debut en la máxima categoría del futbol español. Miguel Layún sigue sumando minutos y disputó 13'.
El Sevilla se reencontró con el triunfo liguero en su estadio tras tres partidos seguidos en este torneo sin conseguirlo y con el mantiene plaza europea, pero su juego dejó mucho que desear ante un adversario que siempre le plantó cara.
Se vio siempre al Girona seguro cuando tuvo que defender y con desparpajo a la contra ante un adversario demasiado lento y previsible en sus acciones, por lo que incluso fue el cuadro visitante el que gozó de las mejores de abrir el marcador.
Entonces apareció la figura del meta de Sergio Rico, cuestionado en las últimas semanas por un sector de la afición pero que salvó a su equipo de irse al descanso en desventaja, primero con dos paradas de mucho reflejo y después al despejar un lanzamiento de penalti que ejecutó Aday Benítez y que el árbitro señaló por manos del delantero colombiano Luis Muriel.
Se notó mucho la ausencia de Banega en la primera parte, pero en la segunda, antes de que se cumpliera el primer minuto de juego, el argentino Joaquín 'Tucu' Correa no desaprovechó un pase largo para superar al portero en una acción que remachó Pablo Sarabia bajo los palos para firmar el 1-0 que a la postre sería el final.