El futbolista mexicano Ulises Dávila, capitán de Macarthur FC, habría quedado libre tras haber sido detenido por un presunto escándalo de apuestas. Dávila al igual que sus dos compañeros de equipo, Kearyn Baccus y Clayton Lewis fueron acusados de manipular tarjetas amarillas durante partidos de la A-League para fines de apuestas.
Las acusaciones surgen de incidentes ocurridos entre el 24 de noviembre y el 9 de diciembre del año pasado, donde Dávila recibió tarjetas amarillas en los partidos contra Melbourne Victory y Sydney FC.
Según las autoridades, los detectives descubrieron que Dávila, de 33 años, estaba presuntamente siguiendo instrucciones de un hombre en Sudamérica para organizar la entrega de tarjetas amarillas en momentos específicos durante los partidos de la A-League.
La policía ejecutó cinco órdenes de registro en Sídney en la mañana del jueves 16, arrestando a Dávila en South Coogee. Los jugadores están acusados de varios delitos, incluyendo la participación en un grupo criminal y la conducta que corrompe el resultado de una apuesta.
Cabe destacar que Dávila no llegó a pisar la cárcel, pero sí estuvo detenido durante un par de horas por la policía australiana. Ahora, para poder evitar volver a ser detenido, el mexicano deberá presentarse a firmar durante las próximas semanas con las autoridades correspondientes mientras continúa la investigación.