Aunque usted no lo crea, Gerard Piqué defendió a Sergio Ramos durante el Clásico Español, pues la afición blaugrana insultó en todo momento al capitán merengue.
En una jugada a balón parado a favor del Barça, la afición aprovechó para gritarle "hijo de puta" a Ramos, y el zaguero culé pidió a la grada no hacerlo.
Piqué levanto la mano derecho y con el dedo índice pidió no insultar de esa forma a los rivales, en particular al capitán de los blancos.
Cabe recordar que en distintas ocasiones ambos jugadores se han dicho de todo dentro y fuera de la cancha, pero la rivalidad sólo queda ahí y siguen siendo buenos compañeros y pareja de centrales con la selección de España.