Tras la brutalidad policiaca que vivió el afroamericano Jacob Blake este domingo 23 de agosto en el estado de Wisconsin y que lo llevó a estar hospitalizado de gravedad, el deporte en Estados Unidos se paralizó como protesta por la violencia racial en el país.
Todo empezó en la NBA cuando los Bucks (originarios de Wisconsin) decidieron no presentarse a la duela para el quinto partido de Playoffs ante el Orlando Magic como protesta por lo ocurrido con Jacob Blake.
Minutos después, la NBA informó que los tres partidos programados para este miércoles quedaban oficialmente suspendidos.
Más tarde la MLB haría su aparición en el movimiento, pues los Brewers, tampoco jugaron ante los Cincinnati Reds, que se negaron a aceptar la victoria por 'default'.
Posteriormente fueron los Seattle Mariners y los Padres de San Diego quienes anunciaron que no jugarían en solidaridad de las protestas.
Aunque la MLS fue la última liga en sumarse a las protestas lo hicieron con un gran golpe sobre la mesa, pues el Inter Miami contra Atlanta United se suspendió por la misma situación.
Es así como este 26 de agosto quedará marcado en la historia del deporte, pues a una sola voz, todas las competiciones protestaron bajo la premisa de 'Black Lives Matter'.