Todo lo que empieza tiene un fin, y así fue la historia de Brittney Griner, estrella de la WNBA, y tras 10 meses en una prisión de Rusia, arribó a Estados Unidos y tan rápido como bajo del avión puso sus manos sobre un balón para pelotear.
La basquetbolista norteamericana ya está con su familia en Houston, y por fin pudo tocar un balón para hacer una clavada. La representante de Griner, Lindsay Kagawa Colas, contó que se encuentra en Fort Sam Houston en San Antonio, donde tuvo su entrenamiento ligero.
“Si ella quiere jugar, será para compartir. Tiene las vacaciones para descansar y decidir qué sigue sin ninguna presión. Le está yendo muy bien. Parece haber soportado esto de manera bastante increíble”, expresó Kagawa para ESPN.
Finalmente, la agente señaló que Brittney no tocó un balón durante su estadía en la cárcel de Rusia, pues no tenía cabeza para eso, por lo que aún no hay fecha para su regreso a las canchas y se tendrá que tomar el tiempo que ella necesite.
“No hay fecha límite para su regreso en este momento. Se está reintegrando a un mundo que ha cambiado para ella ahora. Desde el punto de vista de la seguridad pura, ella no podrá moverse en el mundo de la forma que lo hizo. No es un destino que haya pedido, pero creo que intentará utilizar su fama para siempre”.
Griner no ha dado ninguna declaración tras su llegada a Estados Unidos, pero su esposa, Chrelle Griner, mandó un mensaje en sus redes sociales donde expresó su gratitud por el apoyo que recibió durante los meses que Brittney permaneció presa en Rusia.