Durante un mitin de campaña el sábado a la noche, Donald Trump tuvo que ser sacado del escenario debido a un tumulto, sin embargo, según lo que informó el Servicio Secreto no había ningún arma involucrada.
El candidato republicano se dirigía a sus seguidores en Reno cuando comenzaron algunos disturbios entre el público cercano al estrado. Rápidamente, dos agentes del Servicio Secreto rodearon a Trump y lo sacaron del escenario.
En un comunicado, el servicio dijo que una persona cerca del podio gritó "¡Pistola!" pero no se halló ningún arma. El individuo fue detenido, pero no fue divulgada su identidad ni si fue acusado de delito alguno.
"Nadie dijo que sería fácil para nosotros. Pero nunca nos detendrán. Nunca", dijo Trump al volver al escenario.
El hijo del candidato estadounidense y uno de los asesores de la campaña propagaron el falso rumor de que se trató de "un intento de asesinato".
