Una de las preguntas que los ciudadanos mexicanos se preguntan es sobre si se tendrán que pagar impuestos por hacer depósitos en efectivo, aunque estos deben de ser declarados en el Servicio de Administración Tributaria (SAT).
Hace unos años, en el 2008 fue que entró en vigor la Ley de Impuesto a los Depósitos en Efectivo, la cual estipulaba la aplicación de un impuesto del 3% a los depósitos en efectivo mayores a los 15 mil pesos.
La Procuraduría de la Defensa del Contribuyente (Prodecon) recordó que dicha Ley terminó abrogada a partir del 1 de enero de 2014.
De acuerdo con la Ley, las entidades financieras están obligadas a informar al SAT cuando se tenga un depósito arriba de los 15 mil, a pesar de que el SAT no examina las cuentas bancarias de los contribuyentes, pero sí puede detectar irregularidades en las declaraciones de impuestos.
Según el artículo 59 del Código Fiscal de la Federación, puede presumir tales depósitos pueden ser ingresos de actividades de las cuales se deban de pagar contribuciones.
