El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, afirmó este viernes que no enviará armas "a ningún lado", preguntado sobre el apoyo que su país puede dar a Ucrania tras la invasión de Rusia.
"Nosotros no mandamos armas a ningún lado. Nosotros somos pacifistas", dijo el mandatario tras ser preguntado sobre el tema en la conferencia diaria desde el Palacio Nacional.
López Obrador hizo este comentario después de que trascendiera en medios mexicanos que, a través de una carta, legisladores ucranianos pidieron a la presidenta del Senado, Olga Sánchez Cordero, ayuda para interceder con los socios europeos y sus aliados para que envíen armamento, asistencia militar y humanitaria a Ucrania.
"Si pueden proporcionar cualquier otro tipo de asistencia militar y humanitaria estaríamos muy agradecidos", afirma la misiva, fechada el 3 de marzo.
El presidente mexicano dijo que de ser "necesario" también se protegerá a los connacionales en Rusia.
"Ya Relaciones (Exteriores) está atendiendo esto. Tanto los mexicanos en Ucrania, como los mexicanos en Rusia, protección y ayuda humanitaria a todos. Nosotros somos del partido de la fraternidad universal, que va más allá de fronteras”, concluyó el presidente.
Minutos antes, el canciller mexicano, Marcelo Ebrard, explicó que México, que ha condenado el ataque ruso, se centrará en el envío de ayuda humanitaria, en tanto se da una "oportunidad a la política de la diplomacia".
"México no va a participar en ningún tipo de sanción que no sean las sanciones multilaterales que en su caso aprobase el Consejo de Seguridad de la ONU. Ha sido la postura histórica de nuestro país, en eso no hay ninguna ambigüedad”, agregó el titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE).
Un avión de la Fuerza Aérea Mexicana procedente de Rumania aterrizó en la madrugada de este viernes con 81 personas evacuadas desde Ucrania, en su mayoría mexicanos residentes en el país invadido por Rusia.
La tensión en Ucrania no deja de crecer tras 9 días de guerra, especialmente porque en las últimas horas las tropas rusas atacaron la mayor central nuclear de Europa.