Argentina logró su pase a la final de Mundial de basquetbol de China tras derrotar por 80-66 a Francia, que, a pesar de destellos aislados, se vio superada por el empuje incesante de los sudamericanos y, en particular, del incombustible Scola.
El encuentro se caracterizó más por la buena defensa que por el ataque y ambos conjuntos terminaron con tanteos por debajo de lo promediado durante el torneo.
Salvo Scola, quien incluso amplió sus registros con 28 puntos y 13 rebotes. El veterano baloncestista argentino fue el alma del equipo, una vez más.
El partido, que comenzó con la intensidad que le imprime Argentina a cada encuentro, vio pasar un minuto antes de inaugurar el marcador. Lo hizoNtikilina con una canasta lejana.
Scola anotó dos entradas de pista a pista en dos ataques consecutivos y sumó otros dos puntos en otra penetración. En ese momento (minuto 4) llevaba 6 de los 10 puntos de la albiceleste, mientras que 'les bleus' seguían anclados en la canasta inicial (10-2).
Un triple de Labeyrie despertó a una Francia que no lograba encestar y Nando de Colo salió del banquillo para acercar distancias (16-10, minuto 7) y desatascar el ataque francés. Al final del primer cuarto, Francia estaba totalmente dentro del partido otra vez: 21-18.
En el segundo cuarto los franceses mantuvieron el ritmo y con dos minutos y medio consumidos se pusieron por delante por primera vez gracias a un mate de Lessort tras asistirle De Colo (23-24).
No duró mucho: Marcos Delía peleó bajo el aro para anotar una canasta con un tiro adicional que, no obstante, decidió salirse de dentro. No así al tiro de Laprovittola en el siguiente ataque. Volvían a despegarse los argentinos, al anotar Deck tras uno de los contraataques que han caracterizado al equipo durante el campeonato.
En el minuto 17 Deck dio el susto y se retiró cojeando al banquillo. Entró Scola. A esas alturas del encuentro Fournier estaba ya 'enchufado' (9 puntos, minuto 18), pero Argentina seguía a un ritmo inasumible: Campazzo anotó un triple sobre la bocina que indicaba el final del periodo (39-32).
Ninguna de las selecciones aflojó en la reanudación: Vildoza anotó tres tiros libres tras una falta en los 6,75 metros y Albicy replicó con un triple.
Todo lo que habían fallado desde tres hasta el descanso (25 % de acierto argentino, por un 15 % francés) se tornó en acierto. Un triple de Vildoza, otro de Batum y otro de Scola se sucedieron en un intercambio triplista que hizo rugir al pabellón.
La apisonadora argentina empezó a pasar por encima a Francia. En el minuto 25, el marcador señalaba 52-38 y se veía a los jugadores de la albiceleste disfrutar jugando, disfrutar encestando.
Los intentos tímidos de los franceses por cerrar la brecha se toparon con un muro defensivo casi impenetrable, con un trabajo de los cinco argentinos sobre la pista que les complicó extremadamente la anotación. El tercer cuarto se cerró con 60-48.
M'baye rompió la barrera psicológica de los 10 puntos de diferencia con un triple (60-51). Laprovittola la volvió a colocar donde estaba del mismo modo en el ataque siguiente. Ntikilina sumó dos más desde lejos y Gobert machacó para dejar la diferencia en ocho.
Una canasta de Scola tras asistencia espectacular de Larpovittola llevó los 10 puntos de ventaja de nuevo al marcador, una diferencia que nunca terminó de desaparecer para desesperación francesa.
Scola no hizo nada más que agrandar la brecha. Dos triples seguidos a tres minutos del final (anotó 3 de los 4 que lanzó) le valieron la ovación de la grada, que estalló de nuevo a la conclusión del partido: 80-66.
Así, Argentina pugnará con España por el oro en la final del domingo, en el pabellón Wukesong de Pekín.