Las barras de los equipos de futbol han marcado la historia del balompié al ser por lo general catalogadas como violentas, por estar integradas por personajes que han generado conflictos en diversas ocasiones.
Con sus distintos nombres por todo el mundo, los grupos de animación de los equipos incluso han estado marcados por la política, al ser apoyadores de ciertas ideologías, que en ocasiones provocan choques no sólo en los estadios, sino también fuera de ellos.
LAS TIFOSIS, ENTRE EL FASCISMO Y EL FUTBOL
En Italia, el apoyo a los equipos de futbol es integrados por las tifos, porras que en algunos casos son integrados por fascistas que han desatado polémica en más de dos ocasiones por cánticos o pancartas antisemitas o racistas.
Un ejemplo de ellos es la famosa barra de la Lazio, la cual presume en las tribunas del Olímpico de Roma sus mantas ofensivas entre las cuales se pueden leer frases de apoyo a los Nazis, y en ocasiones se pueden escuchar cantos contra los judíos en un juego entre el cuadro azul de la capital italiana y el Tottenham en el marco de la Europa League.
Las famosas Tifos llegaron entre las décadas de los 60 y 70 al futbol del país de la bota, siendo el AC Milan el primer equipo en tener un grupo de apoyo en cada uno de sus partidos.
ESPAÑA SINTIÓ LA PRESIÓN DE UNA AFICIÓN CON LOS ULTRAS
En décadas pasadas el futbol español se consideró por tener un ambiente tranquilo y familiar, y a pesar de que sigue siendo así, algunos clubes cuentan con Ultras, los cuales se dedican a meter presión a los equipos rivales que visitan sus estadios.
Pero en el mismo caso de Italia, algunas aficiones tienen cierta tendencias y son partidarios corrientes políticas.
Los Ultras llegaron a mediados de la década de los 70 y por ahora en todo el país ibérico tienen control de dichos grupos de animación, los cuales no han generado problemas graves desde hace algunos años.
HOOLIGANS, EL DOLOR DE CABEZA DEL FUTBOL INGLÉS
Los grupos de animación en Inglaterra fueron los primeros en llegar al mundo del futbol, y tras tener actos de violencia en algunos estadios, fueron llamados Hooligans, para catalogarlos como personas violentas.
Los Hooligans aparecieron en los años 60 en diversos estadios de futbol, al ser apoyadores radicales de sus equipos, ya que tenían como objetivo alentar a sus clubes por el precio que fuera, esto incluía realizar actos violentos, lo que fue generando un rechazo por parte de la sociedad, la cual los había aceptado por ser obreros, jóvenes y de clase social baja, por lo general.
Aunque aún no eran determinados como Hooligans, el primer antecedente que se dio de violencia con un grupo de animación fue en 1912 durante un partido entre Liverpool y Manchester United, el cual tuvo que ser suspendido por una fuerte pelea entre seguidores de ambos clubes.
Una de la tragedia más grande que ha vivido el futbol mundial ocurrió debido al fanatismo de los aficionados radicales de Liverpool en el estadio de Heysel en Bruselas, Bélgica, durante la Final de la Champions League en 1985, cuando los seguidores de los Reds empezaron a aventar objetos a los fans de la Juventus y se abalanzaron contra ellos dejando un saldo de 39 muertos y más de 600 heridos.
BRASIL, EL PAÍS DONDE LAS TORCIDAS DOMINAN LA TRIBUNA
Los grupos de aficionados cariocas tienen la fama de ser agresivos y violentos, sin embargo algo que se les reconoce es su pasión para apoyar a sus equipos de futbol.
Mejor conocidas como Torcidas, las porras del futbol brasileño nacieron igual que las europeas hace casi 40 años, y algunas sólo llegaron para crearle problemas a su club, aunque no se comparan con los choques que han manchado balompié como el inglés o italiano, también se han visto en medio de conflictos dentro y fuera de un estadio.
Durante los pasados eventos que se realizaron en Brasil, como la Copa del Mundo y los Juegos Olímpicos, las Torcidas de distintos equipos tuvieron algunas fricciones, debido a que unas apoyaban el proyecto, mientras otras rechazaban dichas justas.
SUDAMÉRICA Y MÉXICO, LUGARES DE GRANDES BARRAS
Los aficionados argentinos pueden presumir que son los padres de las Barras Bravas, ya que algunos datos indican que aficionados con apoyo radical a sus clubes comenzaron a formar grupos de animación desde la década de los veintes.
Tras más de 60 años de apoyo en Argentina, el movimiento de las barras llegó a los demás países sudamericanos hasta los años 80.
En México el concepto de Barra Brava llegó en 1996, siendo Pachuca el primer equipo en tener una, ya que la directiva de los Tuzos pagó a aficionados argentinos para que vinieran a enseñar a los seguidores hidalguenses las bases de una porra al estilo sudamericano.