El Atlético de Madrid cayó por 3-2 contra el París Saint-Germain en Singapur, en un partido en el que los futbolistas de la cantera rojiblanca reparó la falta de puntería de los puntas del primer equipo con dos goles que empataron el partido, pero fueron vencidos por un tanto final galo en el minuto 92.
Víctor Mollejo y Borja Garcés, campeones juveniles de la temporada pasada con dos de los equipos de la cantera rojiblanca, remontaron el 2-0 que habían logrado Cristopher Nkunku y Moussa Diaby para el PSG, pero el atacante Virgiliu Postolachi aprovechó un error para ganar el partido en el descuento.
Al borde de forzar los penaltis se quedaron los canteranos del Atlético, que redimieron con su salida la falta de puntería de Kevin Gameiro y Luciano Vietto, incapaces de embocar las varias ocasiones que tuvieron al contragolpe, en un partido dominado en la posesión por el conjunto francés.
Mientras el Atlético esperaba su oportunidad de salir a la carrera, el PSG dominaba el encuentro apoyado en sus laterales, especialmente con carrilero diestro Colin Dagba, origen del 1-0 parisino a la media hora, con un centro tenso desde la derecha con varios rebotes que acabó golpeando Nkunku en el área para marcar.
No hubo más oportunidades para los tres delanteros rojiblancos, ya que en el 64', Simeone introdujo a cinco canteranos para formar un equipo con solo Adán como jugador del primer equipo. Olabe y Mikel Carro quedaron a los mandos en el mediocampo.
El delantero Moussa Diaby hizo el 2-0 aprovechando una mala entrega de Toni Moya, pero los jóvenes rojiblancos tuvieron su reivindicación con el tanto de Víctor Mollejo, en una ocasión con tres remates que terminó con el gol del hasta ahora juvenil rojiblanco.
Consumó la remontada Borja Garcés, con un intento de centro desde la izquierda que rebotó en Bernede y se metió en la portería de Trapp, y Adán intervino para evitar un gol de Weah con un fuerte disparo, pero un error de Solano que permitió recuperar el balón al delantero del PSG, Virgiliu Postolachi se convirtió en un zurdazo imposible de parar para el 3-2 final.
