Atlético de Madrid no pudo ante el Mallorca de Javier Aguirre y cayó por la mínima diferencia, comprometiendo su puesto en Champions League en la apretada pelea por los cuatro puestos que tiene LaLiga.
Fue desde el minuto 68 que Muriqi adelantó a los locales con un gol desde los 11 pasos, situación que mandó al ataque a los colchoneros en los últimos minutos.
La insistente ofensiva rojiblanca se vio afectada por el retraso de juego que buscaron ocasionar los recogebalones escarlata, quienes fueron captados retirando los esféricos del alcance de Oblak junto a su portería.
Esta situación ocasionó la furia del esloveno, quien estalló y en busca de un balón hizo manoteos y mostró su evidente inconformidad con los chicos afuera de la cancha, situación que molestó a más de uno después de que el momento fuera captado por las cámaras de televisión.
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