En la Cocina del Infierno..

Ignacio Suárez

Ignacio Suárez

Ignacio Suárez

IGNACIO SUÁREZ
| 31 Mayo, 2017

En cada equipo hay cientos de historias por contar. Detrás de cada título, de cada hazaña deportiva, hay muchos 'héroes sin capa' que desde su anónima trinchera en su día a día dan su mejor esfuerzo, anotan su mejor gol, realizan su mejor atajada.

Para ellos NO hay reflectores, entrevistas, ni fama. Son gente común y corriente que se conforman ampliamente con la recompensa de la satisfacción del deber cumplido. Son héroes sin capa que dejan su vida en el club de sus amores y ahí desde su trinchera ven morir a sus padres, crecer a sus hijos, volverse abuelos.

Ellos han sido testigos fieles y mudos de la llegada y salida de los ‘dioses’ de la cancha, con quienes han tenido el privilegio de convivir, de amar y de bromear, porque han sido, para ellos, un poquito hijos suyos.

Así ha sido la vida de ‘Don Juve’, un extraordinario cocinero, pero mucho mejor persona a quien tuve el privilegio de conocer muy de cerca cuando soñaba con ser profesional en las reservas del Deportivo Toluca allá por los ochentas. En aquel tiempo se había estrenado la cocina debajo de las gradas de sombra preferente, así como las habitaciones de la casa club de aquella entonces todavía llamada ‘Bombonera’.

La comida y habitaciones estaban prácticamente reservadas para los ‘fuereños’, jugadores de reserva especial y reserva que venían de Guadalajara y el DF. Los que vivíamos en Toluca, “bien podíamos tragar en casa, a menos de que no tengan”, decía con su acento andaluz y voz aguardentosa el buen Jesús Fernández del Cojo, que era el ‘Francisco Suinaga’ de aquellos tiempos.

Pero ‘Don Juve’ no le hacía mucho caso. A escondidas, infinidad de veces nos colaba a la cocina para ofrecernos una suculenta y nutritiva comida. El pago por alimentarnos: “rompernos la madre para ser famosos y hacer Campeón a su Toluca”. Siete veces fue Campeón.

Pasó el tiempo, mis sueños de ser futbolista se quedaron inconclusos, pero ‘Don Juve’ seguía en el club. Recuerdo una vez, por ahí de 1995, ya con pluma en mano y como reportero, visité su cocina y vi que en una mesa de la Cervecería Modelo, justo en la esquina, estaba comiendo con un ‘tal’ José Cardozo, un delantero a quien el ‘Zurdo’ López estaba a punto de echar porque estaba lesionado. Me dijo: “Fantasmita, apréndete el nombre de ‘éste’ al que voy a sanar con una sopa de papa que es mejor que su ‘bori bori’ (plato típico paraguayo), ya se lo dije y de mí te acuerdas. ¡Va a regresar con una rodilla biónica y va a meter más goles que Pereda!”. Mientras ese ‘tal’ Cardozo sólo se reía levantando el pulgar.

Otra vez, en esa misma cocina tuve el privilegio de entrevistar a don Nemesio Díez, junto a ‘Don Juve’ a quien mucho apreciaba y trataba con singular afecto. “Juve sigue aquí gracias a su ensalada de palmitos. El día que pierda la sazón se va al callejón”, se carcajeó don Nemesio.

Muchos años han pasado. Hoy don Nemesio ya no está entre nosotros, SU ‘Juve’ muy pronto, lamentablemente, podrá llevarle de forma personal aquella ensalada de palmitos que tanto le gustaba. Juventino Beltrán tiene cáncer terminal. Treinta años de su vida ha defendido con honores la cocina de su Deportivo Toluca, que terminaron de manera abrupta.

Fantasma Suárez platica con 'Don Juve'

Esa cocina jamás cerró para nadie que tuviera hambre. Fueron decenas y decenas de jugadores que apoyó no sólo con exquisita gastronomía, sino con sus consejos, su complicidad y hasta con su economía. Muchísimos le estaremos eternamente agradecidos.

Desde hace unas semanas, ‘Don Juve’ ya no puede entrar a su cocina, a su club donde dejó la vida. Problemas administrativos de funestos personajes que sólo saben arrastrar el lápiz y lisonjear falsamente a don Valentín, se han encargado de cerrarle las puertas como si fuera un paria pestilente. Personajes que sabrán mucho de números, pero nada de amor a los colores a su equipo, de ética, de tradición, de sus entrañas, son quienes deciden.

Ellos, dicen ‘cuidar’ el dinero de don Valentín; pueden sin ningún pero y sin investigación firmar cheques por dos millones de dólares como con Darío Botinelli, que costaba sólo 100 mil, eso sí lo pueden hacer, pero NO pueden recibir al ‘cocinerito’. Son personajes tan pobres y pusilánimes que sólo sirven para firmar cheques. Se sienten ‘dioses del Olimpo’, inalcanzables, omnipotentes.

El día de ayer, el C.P. Tiburcio Villegas -así se llama, no hice bullying- presumió en un comunicado oficial del club la irresponsabilidad del hijo de ‘Don Juve’, acusándolo de NO haberse presentado a una supuesta y confirmada tercera cita.

¡Nada más falso y cruel! Hace una semana, el asistente del C.P. Tiburcio, de nombre Anthar Rodea, tuvo una conversación vía WhatsApp con el hijo de ‘Don Juve’, que a continuación reproduzco: “Luis, buenas tardes, me comentó el Sr. Villegas que lo buscaste en el estadio. Contestó a través de la persona de seguridad que al día siguiente te esperaba y no te presentaste. Te puede recibir mañana viernes 26 de mayo entre 10 y 11 a.m”. A lo que Luis Beltrán responde: “Buenas tardes. Así es, lo busqué y no me recibió y NO es verdad que me haya citado al otro día, no me dijeron ni día, ni hora… ¿Qué otro espacio tiene el Sr. Villegas?”, a lo que Anthar respondió: “Luis, martes 30 de mayo, 10:00 a.m.”, a lo que a su vez, Luis Beltrán NO confirmó respondiendo: “Sí, gracias. Perdón, déjame ver mañana el estudio de ‘Juve’ y cuándo lo recibe el oncólogo”.

Conversación de WhatsApp entre Rodea y el hijo de 'Don Juve'

Conversación de WhatsApp entre Rodea y el hijo de 'Don Juve'

Evidentemente NO lo dejaron ‘ver’. En un comunicado emitido a solicitud expresa del C.P. Tiburcio y el Toluca, trataron de evidenciar la IRRESPONSABILIDAD del hijo del cocinero.

Para su mala suerte, en ese mismo momento, día y hora, en una clínica del IMSS de Av. Tecnológico, en Metepec, ‘Don Juve’ y Luis estaban esperando horas enteras para que fueran atendidos por el oncólogo que les programó la cita para ese día, por ello le pedimos que transmitiera en tiempo real en Facebook Live, dejando evidencia del lugar donde se encontraban, que evidenciaran las mentiras del comunicado del Toluca y que pueden checar aquí.

 

 

¿O tenía que haber cancelado la cita con el oncólogo, mi querido Tiburcio? Sobre este delicado tema enteramos a Francisco Suinaga, desde la semana pasada, dijo que resolver este asunto NO estaba en sus manos, pero que insistiría al respecto. Gracias a él, Villegas se bajó del Olimpo para acercarse a los mortales y le mandó que buscaran al hijo del ‘cocinerito’. No se trata de buscar culpables, de nada sirve. En este tema NO gana nadie, TODOS pierden; pierde ‘Juve’, pierde Tiburcio, pierde Suinaga, pierde don Valentín, pierde don Nemesio, pierde el Toluca, pierden los aficionados.

¿Cómo exigir amor a los colores a los jugadores de tu institución, si a personas que dejan su vida en ella, cuando ya no son útiles les das una patada en el fundillo, te escondes y les niegas, al menos, un trato digno?

Y por si preguntan, Luis Beltrán NO buscaba una jugosa indemnización por 30 años de servicios -que quizá bien merecía-, pero les diremos que NO, no fue su intención. Ellos son hombres de bien, con su trabajo de la cocina ‘Juve’ logró hacerlos hombres de bien. Son egresados del ITESM, son brillantes y entregados. Pretendían lo justo, lo mínimo: “un reconocimiento del club, un diploma, aunque fuera hecho en formato de word, para mi viejo antes de que se vaya”, nos dijo un conmovido Luis Beltrán.

La clase y categoría que NO mostró Toluca en su comunicado, sí la plasmó Luis junto a su ‘Don Juve’ en un video que grabó el día de ayer respondiendo a las falsas acusaciones del comunicado, dando por terminada la polémica, agradecidos por las muestras de cariño. El video que está a continuación.

 

No sé cómo termine esta historia, pero NO ha sido la única del maltrato y trato tan indigno a empleados del club. ¿Lo sabrá don Valentín Díez? Por supuesto que NO. Quiero creer que jamás lo hubiera permitido. Lamentablemente en la institución aún existen los Tiburcio Villegas, los Roberto Salgado, los León y otros tumores cancerosos que aún NO han sido erradicados de raíz y se mantienen ahí vegetando, exprimiendo la ubre, engañando al dueño contándole sólo las historias rosas.

Después de conocer esta historia, que NO es la única, ¿ustedes le podrían exigir a los jugadores que se ‘mataran’ por los colores de la institución? Yo, ni madres.

“La gente que muerde la mano que los alimenta, generalmente lame la bota que los patea”: Eric Hoffer.