Hay que ponerle un nuevo nivel al medidor de adrenalina. Arriba del máximo ahora ponle: ‘Punto de Quiebre’. Los deportes extremos tienen una nueva forma de vivirse en el cine con esta película, que recorre el planeta para desenredar una trama ‘detectivesca’ a través de espectaculares actividades radicales, como nunca las viste en el cine.
La nueva versión de ‘Point Break’, ya en cines, retoma la cinta de 1991 con una trama similar: un joven agente del FBI busca desenmascarar a un equipo de atletas extremos que cometen increíbles delitos buscando la iluminación a través de actividades radicales, haciendo lo que pocos se atreverían. El dilema de Johnny Utah al final te pondrá al borde del asiento. Lo que verás con el filme recién estrenado es algo fuera de lo normal, llevando la adrenalina que generan estos deportes hasta tu asiento.
“En escala del 1 al 10, yo calificó la acción en 45”, se aventura a asegurar el venezolano Édgar Ramírez, protagonista de la cinta, en charla con RÉCORD. “Lo que hacen estos tipos está más allá de lo creíble”.
“Las escenas son más reales, impactantes y complicadas que las de 1991, la historia cambia porque el mundo es distinto 25 años después, es una película visualmente nueva gracias a los atletas que participaron en ella”, asegura Andrew Kosove, productor de la cinta. “Es una película desde ‘dentro’, es decir, la audiencia verá la acción como realmente sucede en estos deportes extremos, desde la actividad sin una pantalla verde en el fondo”.
“De lo más complicado para filmar fue la agenda, cambiando tanto de clima y locación, eran grabaciones intensas, y eso que los atletas eran los que hacían las escenas extremas. Fue un aprendizaje rudo, pero valió la pena”, comenta Luke Bracey, quien interpreta a ‘Johnny Utah’, el joven que se infiltra en el grupo liderado por ‘Bodhi’, papel de Ramírez.
La versión 3D de ‘Punto de Quiebre’ es un extra imperdible: Vivir en tercera dimensión las escenas de caídas en ‘wingsuit’ entre las rocas o los saltos en motocicleta a través de peñascos es un viaje aparte, como si estuvieras ahí. Te reto a que no te muevas cuando veas descender los Alpes suizos en snowboard a este grupo de locos, por rutas que parecen imposibles. Es un espectáculo.
