Cuestión de goles
Mito: La Reclasificación se define a goles, es a 90 minutos, si hay empate se tiran penaltis: el sueño de todo aficionado.
Realidad: Cruz Azul parece favorito ante Atlas por la localía, pero esto se define con gritos de gol y los Zorros, pese a la baja de Furch (hizo cuatro), tiene números que lo hacen competir.
La Máquina anotó 21 goles, cinco de sus siete victorias las consiguió por un gol. Atlas marcó 27 y empató nueve de 17 juegos.
El cuadro del Tuca consiguió 13 anotaciones dentro del área, dos en remate con la cabeza, dos de penalti, un autogol y tres en disparo de media distancia.
Los de Mora marcaron 27: 13 con el pie y tres con la cabeza, dos de penalti, tres en tiros fuera del área y cinco de tiro libre. A la defensiva los dos recibieron 22.
Tanto Cruz Azul como Atlas sufren en el juego aéreo, han recibido cinco y seis goles con remates de cabeza; además, en tiros de larga distancia, La Máquina recibió cuatro y los rojinegros tres.
La Máquina tiene un comportamiento de menos a más conforme avanza el partido, anota más goles del minuto 30 al 45 de cada tiempo, anotó en ese lapso de juego 10 de los 21 tantos conseguidos.
Atlas tiene un primer tiempo más explosivo con 16 goles en los primeros 45 minutos. Recibió 13, para el segundo tiempo su producción ofensiva baja.
Con el Tuca, La Máquina sólo recibió gol en cinco de 10 juegos. Los rojinegros no lograron anotar en seis de 17 juegos.
Conclusiones: Todo se define a goles en 90 minutos, si el Tuca consigue ponerse arriba en el marcador tendrá el partido en la condición que le conviene a su forma de juego, aunque el equipo de Atlas tiene solución en los tiros de media distancia, tanto en pelota en movimiento como en táctica fija.
Tras analizar los números, el partido dependerá del primer gol, si lo consigue Cruz Azul podrá manejarlo; si los rojinegros lo hacen, le van a complicar el juego a los locales.
Sólo como dato curioso: en los tres partidos que perdió, Ricardo Ferretti tuvo ventana de 1-0 y terminó sin conseguir unidades.
En lo personal, me parece un extraordinario producto la Reclasificación en el futbol mexicano.