Martina Navratilova volvió a trabajar en televisión en Tennis Channel para su cobertura del Abierto de Miami el martes, menos de tres meses después de decir que tenía cáncer de garganta y cáncer de mama.
“Es genial estar de vuelta. … Encantada de estar aquí”, dijo la 18 veces campeona de Grand Slam en singles y miembro del Salón de la Fama del Tenis Internacional. “Muy feliz de estar trabajando. ¿Cuántas personas pueden decir eso?"
Navratilova, de 66 años, dijo que su sentido del gusto desapareció durante el tratamiento contra el cáncer y que perdió 15 libras. No apareció en televisión durante el Abierto de Australia en enero o el BNP Paribas Open este mes.
“Te pone cara a cara con tu mortalidad, número 1, porque al principio no estaba segura de si era tratable, así que fue difícil”, dijo. “Pero una vez que entré al programa, fue un poco más fácil emocionalmente, pero más difícil físicamente. ... Pero sigo en pie”.
En una entrevista con Piers Morgan en TalkTV programada para transmitirse el martes, Navratilova dijo que los médicos le dijeron que "hasta donde ellos saben, no tengo cáncer" y que debería estar "lista para salir" después de algunos tratamientos de radiación adicional.
Según el periódico The Sun, Navratilova también le dijo a Morgan que cuando le diagnosticaron, "estuve en pánico total durante tres días, pensando que quizás no vería la próxima Navidad" y se le ocurrió una lista de cosas que quería hacer.
Ella notó un ganglio linfático agrandado en su cuello mientras asistía a las Finales de la WTA de final de temporada en Fort Worth, Texas, en noviembre, y una biopsia mostró cáncer de garganta en etapa temprana. Mientras Navratilova se sometía a pruebas en la garganta, dijo, se descubrió el cáncer de mama en etapa temprana no relacionado.
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