Andy Dalton tendrá una doble oportunidad esta tarde cuando intente mantener con vida la temporada de los Cowboys y de paso cobre venganza del equipo que lo dejó en libertad a principios del año.
El mejor quarterback en la historia de los Bengals visitará Paul Brown enfundado en los colores del conjunto de la estrella solitaria. Esta será la primera ocasión que el líder pasador de una franquicia se enfrente a la misma desde que Peyton Manning le hizo frente a sus amados Colts en 2013.
Este regreso traerá un cúmulo de sentimientos encontrados en la mente de Dalton, quien tendrá que estar enfocado en el juego y en sacar el resultado para el equipo que este domingo paga sus cheques.
“Nuestro tiempo en Cincinnati significó mucho para nosotros y es algo por lo que siempre estaremos muy agradecidos por poder pasar nueve años allí”, declaró Dalton previo a su regreso a la ciudad que lo vio forjarse como hombre y padre de familia.
El despunte del Washington Football Team y los Giants obligan a los Cowboys a salir victoriosos de Cincinnati y con ellos alimentar la esperanza que tiene su afición de al menos acceder a los playoffs en 2020. Dallas ha perdido siete de sus últimos ocho enfrentamientos y la situación se le está saliendo de las manos al head coach Mike McCarthy.
Hoy más que nunca necesitan que Dalton salga inspirado a la que fue su casa por 10 temporadas. El veterano quarterback solo tiene una victoria como titular en lo que va del 2020 por cuatro descalabros en su contra. Los números no son nada espectaculares, su toma de decisión es digna de un novato en su primer día en la liga y sus pases simplemente son malos. Dalton está desperdiciando el talento de su cuerpo de receptores y eso tiene furiosa a la afición.
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