El pasado viernes, durante los entrenamientos libres de cara al Gran Premio de Azerbaiyán, la octava prueba del Mundial de Fórmula Uno, Sergio Pérez y Jolyon Palmer impactaron sus automóviles contra un muro de contención debido a la cerrada curva 8.
Ambos pilotos señalaron que el trazo de la curva era muy estrecho ,por lo que le hicieron saber su descontento para evitar posibles futuros accidentes al director de carreras de la F1, Charlie Whiting.
"El bordillo es muy difícil, y no es fácil pasar por él; es muy estrecho y le pedimos a Charlie que intente echar un vistazo para ver si podemos cambiarlo porque todos sentimos que es muy estrecho y que es muy fácil cometer un error ahí.
"Creo que el bordillo está un poco en la parte alta. Hablamos con Charlie sobre la curva 8 y creo que lo revisará e intentará mejorarlo para nosotros de cara al sábado", argumentó Pérez.
Por su parte, Whiting señaló que "la FIA ha cambiado el bordillo en la curva 8 de Bakú, haciéndola menos cerrada y menos dura que antes, con menos elementos de plástico”.
La FIA posteriormente emitió un comunicado en el que se añadía lo siguiente:
"El bordillo del vértice de la curva 8 se ha acortado y el borde de la pista se ha vuelto a alinear. Se ha añadido una fila adicional de barreras TecPro en la primera parte o la barrera de salida de la curva 8".
Checo Pérez obtuvo el sexto puesto en la calificación en el circuito urbano de Bakú y largará desde la tercera línea en GP de Azerbaiyán.
