Linus Pauling, un científico ganador del Premio Nobel, publicó hace poco más de 45 años una investigación sobre los efectos de las dosis masivas de vitamina C en los humanos para combatir los resfriados.
Durante el transcurso de la investigación, Pauling se sometió voluntariamente al consumo de altas dosis de vitamina C, de hasta 18 mil mg; la dosis diaria recomendada para hombres es de 90 mg, y para las mujeres es de 75 mg.
Esta serie de estudios sobre personas, fueron los primeros sobre la vitamina C y su relación con los resfriados, que a su vez fueron el cimiento para la idea popular sobre la prevención y cura los resfriados.
EL SISTEMA INMUNE Y SU RELACIÓN CON LA VITAMINA C
La vitamina tiene importantes propiedades antioxidantes, pero también es esencial para la construcción del organismo, ya que es la base fundamental de la producción de colágeno que necesita el cuerpo.
Anteriormente, la deficiencia de vitamina C era la causante principal del escorbuto, en consecuencia de la falta de colágeno. Por fortuna, las nuevas tecnologías y su aplicación a los cultivos a través de la historia, ha logrado que el consumo haya mejorado, y este problema ya pertenece al pasado.
Un dato que no se conocía sobre la vitamina C, era que la presencia de ésta en nuestro cuerpo se localiza en las células inmunes, y es por este motivo que es necesaria cuando se encuentra una infección en nuestro cuerpo.
¿LA VITAMINA C PREVIENE LOS RESFRIADOS?
Varios estudios se han realizado buscando comprender mejor los efectos preventivos de la vitamina C sobre los resfriados comunes y también sobre los no comunes; sin embargo, los resultados no han sido lo que se esperaba.
Un análisis realizado sobre 20 estudios con un total de 11 mil participantes, dio como resultado que el consumo de 200 mg o una mayor cantidad de vitamina C, no logró reducir la frecuencia sobre los sujetos de investigación del resfriado.
Lo positivo que ha dejado este estudio, es que ha demostrado que el consumo de vitamina C “disminuye” la duración de los resfriados y su severidad, logrando de esta manera reducir la severidad de esta afección sobre las personas.
Asimismo, consumir vitamina C en la dieta regular, no disminuirá la frecuencia de los resfríos, pero estos sin lugar a dudas no se prolongarán en el tiempo, reduciendo su tiempo de afección y siendo menos severos.
Es por ello que ingerir vitamina C no evitará que sufras resfriados, mas su consumo regular logrará que los resfriados sean menos severos y más cortos sus períodos de afección.
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