Este año, algunos corredores del XXXIII Maratón CDMX harán de su esfuerzo deportivo un homenaje a las víctimas de sucesos recientes que han cimbrado al país; buscarán la meta en analogía de esa otra que luce muy lejana en México: la de la justicia, la paz, la transparencia.
Alejandra Quiroz de 29 años, convocó a través de redes a colocar en los extremos laterales, pancartas en las que aparezcan los nombres de los normalistas, los niños que murieron en el incendio de la Guardería ABC, las cinco víctimas del Caso Narvarte, entre otros casos.
“Si hubiera entrenado lo suficiente me gustaría gritar en cada kilómetro el nombre de los 43 normalistas desaparecidos el 26 de septiembre de 2014, pero eso requiere mucho esfuerzo así que este año sólo portaré algunas consignas con acontecimientos que han marcado al país y que han quedado impunes”, aseguró la activista.
Iván Islas, profesor de semiótica y discurso en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM, también correrá en protesta. Él cruzará la meta el domingo para pedir justicia.
“Las causas que han herido a muchos, apelar a la memoria, ése es el objetivo de dedicar el esfuerzo y será un grano de arena para estimular la memoria de quien lea mis leyendas en la camiseta que portaré, lo hago con mucho corazón y convicción”, enfatizó Iván.
Cada zancada será para aquellos que aún no reciben justicia como es el caso de los 43 desparecidos de la Normal Rural Raúl Isidro Burgos de Ayotzinapa, Guerrero; los 22 muertos en Tlatlaya, Estado de México; los 49 niños que fallecieron tras la explosión de la Guardería ABC en Sonora; por el multihomicidio en la colonia Narvarte; por las irregularidades de la Línea 12 del Metro, por los tres niños que murieron en Ostula, Michoacán, “por ellos será mi esfuerzo”, comentó a RÉCORD.
Aseguró que correr es su estilo de vida y en esta ocasión el entrenamiento ha sido intenso desde hace cinco meses, entrenado por el triatleta, Luis Velasco.
“Pienso que un maratón no es terminarlo como sea, sino de hacerlo sin mayores complicaciones físicas y a un buen ritmo”, señaló el profesor.