La NFL ha intentado de cualquier forma detener las protestas, por parte de los jugadores, durante el himno de los Estados Unidos, siendo la última una 'donación' de 100 millons de dólares.
Sin embargo, el plan no resultó como la Liga esperaba y aunque prometieron dar todo ese dinero a organizaciones que apoyan las causas de ciudadanos afroamericanos y la Coalición de los Jugadores, elementos de diversos equipos del deporte de las tacleadas continuaron expresándose durante la ceremonia protocolaria.
En la Semana 13 de la NFL, todavía se pudo apreciar algunas protestas, como las hechas por Marshawn Lynch, quien no se levantó para el himno; así como Robert Quinn, de los Rams, quien alzó el puño durante éste; lo mismo que Russel Okung, de los Chargers.
Pese a que Donald Trump pidió un castigo severo para todos los jugadores que se quejaran, la Liga tendrá que idear un nuevo plan, con el motivo de evitar estas protestas.