El pasado lunes los Kansas City Chiefs recibieron en Arrowhead a los Raiders de Las Vegas, en el primero de los tres juegos de Navidad que la NFL programó para el pasado 25 de diciembre.
En este encuentro, donde cayeron los Chiefs, la NFL registró una audiencia de 29 millones de aficionados viendo el partido, en gran parte, gracias a la presencia de la cantante estadounidense Taylor Swift.
Este número de alcance es récord en la historia de la National Football League, rompiendo la marca establecida en el juego de Navidad del ya lejano 1989.
El encuentro registró un pico máximo de 37 millones de espectadores en la transmisión en simultáneo por CBS y Nickelodeon, además de superar en un 29% la audiencia registrada en el juego de Navidad del 2022.
Las Raiders, tras la victoria, reaniman sus esperanzas de llegar al juego de comodín, mientras que los Chiefs complican su pase y le dejan camino libre a los Ravens de Baltimore para hacerse de la Conferencia Americana en este 2023.