Los Eagles jugarán el Super Bowl LVII con una ofensiva construida enteramente por el reclutamiento colegial. De los 11 titulares que tiene el conjunto de Philadelphia en el ataque, 10 fueron elegidos en el draft de la NFL.
El trabajo realizado en los últimos años por la gerencia de los Eagles, encabezada por Howie Roseman, ha llenado de talento el roster de los actuales campeones de la Conferencia Nacional. Nombres como Jalen Hurts, DeVonta Smith, Lane Johnson y Jason Kelce que hoy son piezas vitales en la ofensiva, llegaron a Philadelphia a través del draft.
En toda la ofensiva de los Eagles solo hay un jugador que no llegó al equipo mediante el proceso de reclutamiento de talento colegial de la NFL. A.J. Brown es la única pieza de la ofensiva que no fue drafteada por el conjunto de Philadelphia, pero también significó un estupendo trabajo en la gerencia de Roseman. Los Eagles se hicieron de los servicios del receptor a cambio de una selección de primera ronda y otra más de tercera.
Estos Eagles se han armado gracias al paso de tres entrenadores en jefe previo a la llegada de Nick Sirianni. Doug Pederson trajo a Jalen Hurts, Chip Kelly seleccionó a Lane Johnson y el mismo Andy Reid — futuro rival del conjunto de Philadelphia en el Super Bowl LVII — eligió a Jason Kelce. Esta ofensiva simplemente sería inoperante si alguno se estos tres elementos faltarán en el terreno de juego. Fue Sirianni quien eligió a DeVonta Smith, su segundo objetivo en el juego aéreo por detrás de Brown.
Del lado defensivo, solo Fletcher Cox, Brandon Graham, Avonte Maddox y T.J. Edwards fueron elegidos en el draft por los Eagles.
