Contra todo pronóstico y sorprendiendo a propios y extraños, los Dolphins (3-7) derrotaron a los Ravens (6-3) en el primer partido de la Semana 10, en un partido marcado por las banderas y las inconsistencias ofensivas.
Lamar Jackson y compañía fueron contenidos solamente a 10 puntos, su marca más baja de la temporada. El antiguo MVP lanzó solamente 238 yardas y una anotación, con un touchdown y una intercepción. Por tierra, tuvo solamente 39 yardas.
Miami tuvo un partido con sorpresas a lo largo. Jacoby Brissett inició por una lesión de Tuz Tagovaiola, pero tras un golpe, tuvo que salir del partido y el hawaiano ingresó, con fracturas de dedo. Lideró a su equipo a la victoria y finalizó con 158 yardas. Por tierra, Myles Gaskin sigue sin demostrar su eficiencia, con 31 yardas en 14 acarreos.
La defensiva de Dolphins fue la que dio la sorpresa. Además de contener a Ravens a solamente 304 yardas totales, la jugada clave del partido fue el fumble ocasionado por Xavier Howard en el cuarto período, mismo que regresó 49 yardas hasta la anotación, que puso arriba en el marcador 3-16.
El único touchdown de Baltimore en el partido, llegó en el último cuarto de juego, cuando Lamar Jackson conectó en u pase de cinco yardas con Mark Andrews. Los Ravens dejaron escapar una buena oportunidad de incrementar su ventaja en la división Norte de la AFC.
La siguiente semana, los Dolphins viajarán a Nueva York para medirse ante los Jets, en busca de su tercera victoria consecutiva en la temporada. Los Ravens intentarán rebotar de esta sorpresiva derrota ante Chicago, en el Soldier Field.
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