SALVADOR RODRÍGUEZ | SAN ANTONIO, EU
El filipino Nonito Donaire (28-1, 18 Ko’s) consiguió su cuarto título en diferente categoría al doblegar por decisión dividida (112-115, 117-110 y 117-110) al puertorriqueño Wilfredo Vázquez Jr. (21-2-1, 18 Ko’s) en una pelea que no resultó tan explosiva como se esperaba, pero que le alcanzó al asiático para ceñirse el fajín Supergallo de la Organización Mundial de Boxeo.
La pelea no resultó lo explosiva que se esperaba, pero los dos peleadores tuvieron sus momentos y hasta Vázquez mostró mucho corazón al levantarse lastimado en el tercer round y aguantar fuertes andanadas de su rival Donaire, quien se lastimó la mano izquierda, pero aún así le alcanzó para ligar su cuarto cetro tras haber gobernado en peso Mosca, Supermosca, gallo y ahora Supergallo.
La rapidez de Donaire fue evidente desde el primer episodio y provocó que Vázquez no soltara su candela como esperaba, y aunque la mayoría de los golpes del filipino se quedaban en los guantes, conectó dos buenos ganchos al cuerpo que resintió el boricua.
En el tercer asalto llegó la acción. Un volado de izquierda de Nonito lastimó a Vázquez, que se fue contra una esquina y ahí soportó los cañonazos de izquierda del filipino, librando apenas el round y sacando la casta al aguantar el castigo.
Reaccionó de a poco Vázquez con su mano derecha, pero las cualidades del filipino no le permitieron irse con todo como él deseaba. Ya con el ojo derecho casi cerrado a partir del quinto, Nonito no fue el mismo y el boricua comenzó a atacar con su recta derecha, aunque consciente de estar sobre un barril de pólvora.
Volvió Donaire a partir del octavo asalto, atacó con furia al boricua y hasta se dio el lujo de ';payasear'; un poco en el ring, algo que le reprobó el respetable. En el noveno el ‘Filipino Flash’ buscó con todo el nocaut y casi le sale al enviar a la lona a su enemigo con tremendo uper y gancho de izquierda.
Continuó el duelo, Vázquez intentó pero ya nada logró ante un Donaire que aunque intentó, ya no pudo lograr el nocaut y también se conformó con llevarse el triunfo por decisión dividida, no sin antes fajarse ambos en los segundos finales.
