Jake Olson corrió hacia el campo del Coliseum con el uniforme de la Universidad de California y completó dos saques para gol de campo.
Olson, un invidente de 19 años, recibió una ovación de pie en el Coliseum antes que participara en el último entrenamiento de USC en la primavera. Después que puso el balón en las manos del colocador, recibió otra ovación de los aficionados y felicitaciones de sus compañeros Trojans, quienes han estado viendo su trabajo en las prácticas desde la temporada pasada.
"Cuando corrí por primera vez allá afuera y la afición gritó, tuve que contener las lágrimas", declaró Olson. "Fue muy emocional. Me tocó el corazón que recibiera la oportunidad de realizar un saque. He estado en muchas prácticas de primavera en mi vida, así que ser parte de una fue una gran sensación".
Como cualquier centro largo, Olson es un perfeccionista. No estaba contento con su primer saque. "Es sólo que sentí que fui un poco cauteloso", reconoció Olson. "Fue un poco bajo, pero sucede. Creo que salió bien".
Olson perdió su ojo izquierdo por una extraña forma de cáncer de retina cuando tenía 10 meses de edad, y perdió completamente la vista en el 2009 cuando tenía 12 años de edad. Ha estado cerca del programa de USC desde la época del entrenador en jefe Pete Carroll, y él le pidió que viera la práctica de los Trojans la noche previa a la cirugía en su ojo derecho.