Paige por fin regresó a la WWE, luego de estar fuera de los cuadriláteros por un tiempo, y lo hizo en RAW para atacar a la campeona Alexa Bliss.
Durante la lucha para definir a la retadora número uno al campeonato Femenino de la marca roja, Paige ingresó a la rampa y, con ayuda de Sonya Deville y Mandy Rose, gladiadoras que pertenecían a NXT, atacó a Mickie James y Bayley, quienes se encontraba enfrentando a Sasha Banks y Alicia Fox.
Luego, tras realizar su intervención en el ring, en backstage se encontraron con Alexa a quien atacaron y dejaron muy lastimada en el piso.
En primera instancia, la luchadora británica recibió una suspensión por parte de la empresa de los McMahon, luego recibió otra y aprovechó para realizarse una operación en las cervicales que la mantuvo fuera del ring poco más de un año.