Simone Biles cosechó su sexto oro olímpico y su segundo en París 2024. Con una actuación sobresaliente, la atleta estadounidense de 27 años alcanzó la gloria en la prueba reina de la gimnasia artística con un total de 59,131 puntos, mientras que la brasileña Rebeca Andrade se quedó con la plata y la estadounidense Sunisa Lee con el bronce.
En un momento histórico, la nacida en Columbus, Ohio, recuperó el trono del concurso completo después de haberlo perdido en Tokio 2020 al retirarse para atender su salud mental. Ahora, una renovada Biles regresó a la máxima justa y de qué manera, dominando tres de las cuatro rotaciones en el all-around individual.
Simone comenzó su participación en potro, donde marcó un destacado 15.766 que la puso por delante de todas las rivales. Sin embargo, un par de errores en las barras asimétricas, que le sumaron un 13.733, la relegaron hasta el quinto puesto. Para la tercera rotación en la barra de equilibrio, Biles volvió a ser la más destacada con un 14.566, dejando la competencia por definirse en la última prueba.
Pese a tener toda la presión encima, la estadounidense demostró por qué es la mejor gimnasta de la historia y con un ejercicio de suelo impecable puntuó 15.066 unidades, consiguiendo así su sexto oro en unos Juegos Olímpicos.
Estos logros de Biles no solo serán recordados por convertirla en la gimnasta estadounidense más laureada de la historia en unos Juegos Olímpicos, sino también por ser un ejemplo de resiliencia y valentía al dar a conocer al mundo los problemas mentales que atravesó en Tokio 2020 y cómo los superó gracias al valor de hablarlo