Empleados de la Federación Mexicana de Futbol (FMF), presentaron una denuncia penal en contra de Fidel Kuri, propietario de los desaparecidos Tiburones Rojos por intimidaciones y violencia de género.
Ana Esther Peniche Adama, directora general de regulación y asuntos deportivos de la FMF, fue la encargada de presentar la querella en Boca del Río, Veracruz argumentando que Kuri Grajales incita a la violencia a los aficionados del cuadro jarocho, señalando a Peniche y a dos directivos más como los responsables de la desafiliación del equipo de la Liga MX.
El expresidente de los escualos también fue acusado de violencia de género en contra de la directora, por lo que se solicitaron medidas especiales de protección, tales como una orden de alejamiento.
Las acusaciones en contra del también empresario obedecen a una serie de intimidaciones, agresiones y ofensas personales que este ha proferido en contra de Peniche a través de múltiples publicaciones.
El dueño de Tiburones Rojos también es señalado de haber filtrado y publicado información reservada a asesores jurídicos e imputados de la carpeta de investigación UIPJ/DXVII/F-IV/332/2020, con ‘fines ilícitos’ en diferentes medios de comunicación y en las cuentas oficiales del Club Deportivo Veracruz, por lo que de encontrarse culpable podría purgar una pena de hasta dos años en prisión de acuerdo con el Código Penal veracruzano por este delito.
Fue a principios de diciembre del 2019 cuando la FMF decidió desafiliar al Veracruz, luego de atravesar una grave crisis económica y administrativa donde en la que se adeudaban varios meses de sueldo a jugadores, cuerpo técnico y personal administrativo; sin embargo, el propio Kuri Grajales culpó a Ana Esther Peniche, Enrique Bonilla y Alejandro Irarragorri como los responsables de la expulsión del equipo.
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