Las cámaras de televisión y de los fotografos que se encargaron de captar detalles del encuentro entre Querétaro y el Atlas fueron testigos de los hechos de violencia que se suscitaron entre barras de ambos equipos y lograron tomar los rostros de los delincuentes que causaron destrozos al interior del Estadio Corregidora.
Después de liarse a golpes en las tribunas del inmuble queretano, varias familias buscaron resguardo al interior de la cancha, pero fueron seguidos por rigosos que buscaron continuar con los enfrentamientos sin importar que en el lugar se encontraban personas inocentes como mujeres y niños.
Sin embargo, los rostros de los agresores quedaron plasmados en la lente de los fotografos lo que permitirá una pronta identificación de los agresores.