Qatar 2022 no puede esperar, a partir de ahora esperan cuatro años de un proceso renovado para que la Selección Mexicana llegue al siguiente Mundial con el objetivo de romper las barreras.
Rusia 2018 fue el término de un ciclo para varios elementos que por edad o rendimiento verán difícil la posibilidad de estar de nueva cuenta en la fiesta del futbol más grande.
Una buena camada de jugadores se avecina, torneos como el reciente ‘Esperanzas de Toulon’, el Mundial Sub 20, los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro de 2016 pusieron nombres en la órbita del futbol mexicano que vislumbran como el futuro para el siguiente proceso mundialista.
Nombres como el de Rodolfo Pizarro, Diego Laínez, Orbelín Pineda, Roberto Alvarado, Jesús Godínez son algunos de los que proyectan ser el nuevo ataque del Tricolor, que estarán acompañados de los hombres de experiencia como Hirving Lozano, Carlos Vela y Raúl Jiménez, estos dos últimos limitados por su condición física con la que lleguen a aquel momento.
La media cancha promete con Omar Govea, Jonathan González, Uriel Antuna, Víctor Guzmán o Erick Gutiérrez, quien en Rusia 2018 no pudo ver minutos, sin embargo, han realizado un buen proceso de selecciones menores con el camino abierto de lo que espera el verano en cuatro años.
Mientras que la defensa la liderará Carlos Salcedo, Jesús Gallardo y Edson Álvarez, tres de las revelaciones del combinado nacional de lo que fue esta justa veraniega y que tienen parte de la responsabilidad de cobijar a las nuevas generaciones que se sumen a la camiseta del equipo nacional.
Uno de los 'mayores' que seguirá vigente por su quinta Copa del Mundo, será Guillermo Ochoa, quien buscará seguir al resguardo de los tres palos de la Selección, no obstante, tendrá una nueva generación de porteros con Raúl Gudiño y Gibran Lajud, quienes han sobresalido con su participación y dejan claro que es una de las posiciones de la selección que menos peligra.
