Desde la base juvenil, la nueva estructura de Selecciones Nacionales busca desarrollar una nueva identidad del Tri, con intensidad como base, con dinamismo, mentalidad ganadora y flexible en lo táctico, explica Andrés Lillini, nuevo director de representativos menores.
“Necesitamos generar una identidad de jugadores y técnicos de dientes apretados, es una oportunidad única”, explica Lillini a pregunta de RÉCORD. “La buscamos con base en el modelo de juego, que es lo que te representa en la cancha, es lo que llamo ‘núcleo interno’: todo lo que sucede en el campo tiene una identidad, y va acompañado del ‘núcleo externo’, que es lo que haces fuera: representar a una Selección, a un país, desde la Sub 15 a la 23.
“En esa identidad de cancha necesitamos equipos dinámicos, que los parámetros para medirlos sean uno solo, sin perder el enfoque con la Mayor. También buscamos que sea flexible, el futbolista debe adaptarse a tres sistemas, que son nuestra base de metodología, saber jugar una línea de cinco y una de cuatro. Por ejemplo, si tienes dos delanteros buenos y los dos van por dentro, tienen que jugar sin sacarle la identidad al equipo”, detalla el director de juveniles.
“No hay una identidad de sistema, sino de buenos futbolistas. Selecciones dinámicas, flexibles y ganadoras, con intensidad, que es lo que nos marca la pauta. Cocca sabemos que con Atlas fue muy intenso, estamos emparentados con esa situación. Más allá de los nombres propios de las Selecciones, hoy el futbol te lleva a competir con los mejores por lo menos a igualar en ciertos aspectos: intensidad y la dinámica, después ganará uno por el talento.
“Nuestros técnicos deben saber que deben ser flexibles para no morir con un sistema, muy dinámicos para cuando no alcance el talento soportar las embestidas y llegar al arco contrario, y después intensos, incluso en el día a día”, considera Lillini.
